Con el deseo de que la iglesia crezca, muchos de nuestros líderes siempre están pendientes de las últimas estrategias evangelísticas. No obstante, si en nuestras iglesias no hay crecimiento, quizá no sea porque no nos preocupamos de las personas nuevas, sino porque no estamos discipulando a los miembros de forma eficaz. Muchas veces nuestras iglesias no tienen un plan coherente de discipulado y los líderes creen que no tienen los suficientes recursos para animar a sus miembros a ser verdaderos seguidores de Cristo. Greg Odgen habla de la necesidad del discipulado en las iglesias locales y recupera el modelo de Jesús: invertir en un grupo pequeño de personas para que sus vidas sean transformadas y que así puedan ayudar a otros a caminar hacia la madurez en Cristo.Odgen habla mucho de la transformación; no solo de la transformación de los discípulos, sino también del mismo concepto de discipulado. Según él, el discipulado debería convertirse en un proceso que se pueda transmitir y que así tenga un impacto a través de las generaciones. Bíblico, práctico y enormemente eficaz, este enfoque en el discipulado ya se ha usado con mucho éxito en cientos de iglesias en los Estados Unidos y también en Europa. Un discipulado que transforme vidas puede ayudar a tu iglesia a transformar la vida de sus miembros.Transforming DiscipleshipDesiring for their church to grow, many of our leaders are looking for the most recent evangelistic strategies. But if there is no growth in our churches, perhaps it is not because we are unconcerned about new people, but because we are not effectively discipling our members. Often our churches do not have a coherent plan for discipleship, and leaders believe they do not have enough resources to encourage their members to be true followers of Christ. Greg Odgen shares the need for discipleship in the local church and resurrects the pattern of Jesus: to invest in a small group of people so their lives are transformed, so that they can help others walk toward maturity in Christ.Odgen shares a lot about transformation; not just transformation of the disciples, but also of the very discipleship concept. According to Odgen, discipleship should become a process that can be shared and, thus, impact each generation. Biblical, practical, and greatly effective, this approach to discipleship has been used with great success in hundreds of churches in the USA, and also in Europe. A discipleship which transforms lives can help your church transform the lives of its members.