El Amor No Viene Con Manual de Instrucciones

<p>Luisa Mendosa -Lu para los amigos- vive rodeada de energías organiza su día según la luna y mantiene conversaciones bastante fluidas con su tostadora. Carla Ramos en cambio cree en el poder de las hojas de cálculo en el orden meticuloso y en que el detergente debe tener una etiqueta bien alineada.</p><p>Jamás se habrían cruzado... si no fuera por Ricardo un encantador personaje que con más carisma que escrúpulos les ha vendido <strong>el mismo piso</strong> en Valencia. Dejarlo atrás parece fácil hasta que descubren que por alguna razón extraña -y tal vez poco legal- ninguna logra deshacerse del lugar. No les queda otra que compartirlo. Piso rutina y dos gatos que no aceptan ni órdenes ni contradicciones: Santiago con mirada de filósofo cansado y Churrós pequeño tirano de pelo suave y uñas rápidas.</p><p>Desde el primer día la convivencia se convierte en una guerra fría de silencios pasivo-agresivos disputas por el espacio del frigorífico y normas del lavavajillas que ninguna recuerda haber aprobado. Pero lo que empieza como una lucha por sobrevivir bajo el mismo techo poco a poco va transformándose en algo más complejo. Hay roces que no se deben solo al carácter... y silencios que no siempre son por enfado.</p><p>Entre rituales lunares y diagramas de flujo las dos mujeres descubren que a veces justo donde crees que todo se está derrumbando puede estar empezando algo completamente distinto.</p><p>Y mientras tanto los gatos observan. Con juicio. Y quizás con algo de complicidad.</p>