El Negocio Valentine

<p class=ql-align-justify>Se le llamaba El Rey de Honduras... y con razón. Washington Valentine encontró en este país distintas formas de hacer negocios entre ellos el ferrocarril que conectaría el Atlántico con el Pacífico plantas eléctricas y la explotación minera especialmente en San Juancito. Nada lo detenía... ni siquiera la ley.</p><p class=ql-align-justify><br></p><p class=ql-align-justify>A míster Valentine no le bastó con hacerse millonario gracias a su visión (y también al engaño la estafa y sobornos) sino que a su retorno a Estados Unidos en 1911 entabló una demanda en contra del Estado de Honduras por incumplimiento. Esto motivó al Diario El Observador editado en Tegucigalpa a publicar una serie de artículos para desenmascarar al osado aventurero e inversionista.</p><p><br></p>