Hellen La Mercenaria del Pueblo

<p>En las sombras de la edad media</p><p>mi vida se tejió con hilos</p><p>de pobreza y dolor. Fui testigo de</p><p>los maltratos que mi madre y</p><p>yo sufríamos a manos de mi propio</p><p>padre.</p><p> </p><p>En la oscura espiral de la desesperación caí en la prostitución y</p><p>casi pagué con mi vida las consecuencias amargas de ese camino.</p><p> </p><p>Hoy desde lo más profundo de mi experiencia les digo a mis hermanas:</p><p>no permitan que las adversidades las definan ni caigan en las</p><p>trampas que la vida nos tiende. No dejen que la pobreza y el abuso</p><p>dicten su destino. Luchen por sus sueños con la fuerza de mil batallas.</p><p> </p><p>Aunque mi pasado esté marcado por sombras he aprendido que no</p><p>todos los hombres son iguales. No busquen venganza en su corazón</p><p>porque el odio solo perpetúa el ciclo de la miseria. Más bien alcen</p><p>la voz luchen por la justicia y el respeto que merecen.</p><p> </p><p>Mujeres somos fuertes somos valiosas. No se rindan ante las</p><p>circunstancias luchen por un mañana mejor. Que mi historia sirva</p><p>como lección pero también como inspiración para que ninguna mujer</p><p>más caiga en las garras de la desesperación. El poder está en ustedes</p><p>en su resiliencia y determinación. ¡Adelante conquisten sus sueños</p><p>y desafíen el destino con coraje y dignidad!</p>